Según el New York Times, los combatientes de la oposición siria han lanzado la mayor ofensiva contra las fuerzas gubernamentales en años, lo que hace temer el resurgimiento de una guerra civil que ha estado congelada en gran medida durante años. El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en el Reino Unido, dijo que los rebeldes comenzaron el miércoles una nueva ofensiva en la provincia noroccidental siria de Alepo. El jueves, las fuerzas de la oposición lograron avances, capturando varias aldeas nuevas. Dos días de intensos enfrentamientos se han saldado con la muerte de más de 150 combatientes de ambos bandos. La ofensiva unió a las distintas facciones de la oposición. Un comandante armado de la oposición dijo que la ofensiva tenía "como objetivo detener los ataques de las fuerzas gubernamentales y sus aliados de las milicias respaldadas por Irán". Los medios estatales sirios informaron que las fuerzas gubernamentales estaban sufriendo "ataques terroristas a gran escala" contra aldeas, pueblos y bases militares y estaban respondiendo "en cooperación con fuerzas amigas", infligiendo grandes pérdidas a los rebeldes, pero los medios no especificaron qué fuerzas amigas. Aunque Siria no estuvo directamente involucrada en el conflicto [de Gaza] que sacudió a Oriente Medio el año pasado, su territorio ha sido durante mucho tiempo un campo de batalla para las potencias internacionales, según el análisis. Israel ha estado llevando a cabo ataques mortales en Siria durante años, diciendo que tiene como objetivo a militantes respaldados por Irán, incluido el grupo libanés Alá.
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La oposición armada en Siria lanza un ataque a gran escala, renovando las preocupaciones sobre la guerra civil.
Según el New York Times, los combatientes de la oposición siria han lanzado la mayor ofensiva contra las fuerzas gubernamentales en años, lo que hace temer el resurgimiento de una guerra civil que ha estado congelada en gran medida durante años. El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en el Reino Unido, dijo que los rebeldes comenzaron el miércoles una nueva ofensiva en la provincia noroccidental siria de Alepo. El jueves, las fuerzas de la oposición lograron avances, capturando varias aldeas nuevas. Dos días de intensos enfrentamientos se han saldado con la muerte de más de 150 combatientes de ambos bandos. La ofensiva unió a las distintas facciones de la oposición. Un comandante armado de la oposición dijo que la ofensiva tenía "como objetivo detener los ataques de las fuerzas gubernamentales y sus aliados de las milicias respaldadas por Irán". Los medios estatales sirios informaron que las fuerzas gubernamentales estaban sufriendo "ataques terroristas a gran escala" contra aldeas, pueblos y bases militares y estaban respondiendo "en cooperación con fuerzas amigas", infligiendo grandes pérdidas a los rebeldes, pero los medios no especificaron qué fuerzas amigas. Aunque Siria no estuvo directamente involucrada en el conflicto [de Gaza] que sacudió a Oriente Medio el año pasado, su territorio ha sido durante mucho tiempo un campo de batalla para las potencias internacionales, según el análisis. Israel ha estado llevando a cabo ataques mortales en Siria durante años, diciendo que tiene como objetivo a militantes respaldados por Irán, incluido el grupo libanés Alá.